El vuelo del colibrí

Recuerdo que cuando era niña el primer cuento que escribí se titulaba "El colibrí viajero", no era la gran cosa, realmente lo hice en el salón de clases porque el libro de texto de primer año de primaria decía que había que escribir un cuento y junto había el dibujo de un colibrí.

Pero lo hice ahí en el salón en menos de 15 minutos inventé una historia de un colibrí que gustaba de tomar el néctar de las flores en la primavera, pero cuando llegó el invierno se tuvo que resguardar del frío en una cueva y esperar a que la primavera llegara de nuevo y volar para poder seguir probando el néctar de las flores.

Me acuerdo que tanto mi mamá como la maestra cada una pensó que la otra me había contado el dichoso cuento y lo apropié como de mi autoría: La verdad es que yo había hecho ese cuento.

Creo que siempre me gustó inventar y escribir historias, ya sean cuentos, poemas, novelas, el blog y mis notas informativas. Escribir siempre ha sido mi vida y es algo que me calma el alma y me llena el corazón.

Conforme fueron pasando los años, me fui olvidando de ese cuento, sólo mi madre en ocasiones recordaba ese cuento y me decía "¿Te acuerdas cuando la maestra y yo pensamos que alguien que había contado ese cuento?". Solo reía un poco y asentía.

En mis últimos meses en la universidad, ese cuento ha pasado por mi mente un sinfín de veces, y no entendía por qué ¿Cómo es que algo tan insignificante como un cuento de menos de un párrafo podía haber marcado tanto mi vida?

Hasta que un día comprendí algo de manera muy simple, como todo lo importante en esta vida: El colibrí era yo, la primavera fueron mis años felices siendo niña y adolescente y el néctar de las flores son las buenas oportunidades que he tenido, el invierno y la cueva son los momentos duros y difíciles que he pasado en mi juventud y la llegada de la próxima primavera son las esperanzas que tengo en el futuro que me espera adelante.

Hasta la próxima.-

Al mundo le hace falta Barney...

Y no me refiero a Barney porque sea medio homosexual...

Cuando era niña, había una canción en particular que hablaba sobre la familia y los diversos tipos de familias que hay.

No hay ninguna familia que se parezca a otra.

Y si de eso te habla una canción infantil del año de 1996, no entiendo como es que el concepto de "ideología de género" siga tan enraizada en la psique de las posturas más conservadoras de la sociedad. (Supongo que pensaban que Barney dañaba a los niños por ser morado) (Creánme, a mí también me daba miedo Barney, pero por ser una botarga, no porque fuera morado).

Si no me creen que existe tal canción, aquí se las dejo:

Me llama mucho la atención todo el incendio mediático que desató toda esta semana el movimiento "Frente unido x la familia" y la marcha que se llevó a cabo este 10 de septiembre.

Es mucha la polémica y las disputas que se desataron tanto virtual como públicamente respecto a la posición de este movimiento, que bajo los argumentos de "Con mis hijos no te metas" "Defendamos la familia biológica"

Okay, hablemos de biología:

Cuando mamá gato y papá gato se quieren con toda el alma... está bien no así, era broma.

Ahora, en serio: ¿Tienen mucho miedo de que los niños sepan el funcionamiento de sus cuerpos? No digo que los niños actualmente no sean inocentes, pero seamos francos: Los niños no son tontos.

Los tontos somos nosotros tratando de creer que los niños no nos van a entender. Recuerdo que en una ocasión, cuando tenía siete años mis padres estaban viendo la película de "Mujer bonita", justo en la escena donde Richard Geere entra a la habitación del hotel con Julia Roberts mi papá me comentó lo siguiente de esta manera:

"¿Sabes qué es ella? Ella es una prostituta, ella cobra por tener sexo con los hombres, y eso como todo trabajo, no tiene nada de malo, malo fuera si ella robara; ¿Ves lo que está mostrando? Es un condón, es una funda de latex que protege a las personas de contraer enfermedades o de quedar embarazadas por accidente".

¿Crecí traumatizada? No ¿Lo entendí a la primera? No mucho la verdad, pero algo me queda muy claro: El concepto del sexo está en nuestro código genético y en nuestra mente como algo preprogramado.

Somos nosotros los que "vandalizamos" el concepto de sexualidad a tal grado que un beso lo mostramos como algo malo a los ojos de un niño.

Estamos creando una generación que no quiere, no ama, no muestra afecto. Así sea hombre, mujer o quimera.

Niños que no muestran amor ni a sus propios padres, porque en el afán de varios padres de mantener a sus hijos en una burbuja de "inocencia" (sí, la comillas son adrede) olvidamos enseñar a los niños ser empático.

Un niño es inocente cuando quiere sin ver condición, raza, religión o preferencia alguna.

Nosotros estamos enseñando a los niños bajo una cultura de odio, luego no se pregunten porque los niños son violentos y le echen la culpa a los videojuegos. Porque no es así.

Hablemos ahora de las familias: Familias hay de todos tipos, colores y tamaños.

Según lo estipulado por el Frente unido x la familia, si no tienes papá y mamá en tu casa no tienes familia.

¿Perdón?

Soy huérfana desde hace año y medio y mi hermano quedó en la orfandad siendo menor de edad. Según este movimiento al no estar mi papá viviendo en mi casa (no se puede porque pues... cadáver), mi hermano no tiene una familia.

Osea cómo, ¿Y el apoyo que le damos mi hermana, mi mamá, mis tías, mi abuela y yo no cuentan? ¿Todo porque mi hermano no tiene un papá viviendo en su casa? No pues entonces dejénme sacar el cuerpo del panteón y ponerlo en el patio para que mi hermano pueda tener una familia a los ojos de este movimiento.

Creo que una familia es el soporte que tiene cada uno con el amor que nos dan, con el apoyo que nos brindan. Si uno se siente apoyado y amado por un grupo de personas cercanas a ti, esa siempre será tu familia, tengan o no lazos sanguíneos.

¿Y la gente que vive con sus abuelos? ¿Con sus tíos, con toda su familia en un mismo techo? ¿Los hijos de padres divorciados? 

¿Qué es lo que son?

¿Nada?

Concepto de familia:

Conjunto de ascendientes, descendientes y demás personas relacionadas entre sí por parentesco de sangre o legal.

Digo, por si no quedaba claro.

¿En qué momento dice que debe tener papá y mamá viviendo bajo el mismo techo?

No se vale imponer el criterio de uno a los demás, y eso va para ambas caras de la moneda.

Empezemos a fomentar el amor entre personas, pero sobre todo el RESPETO. Porque si es cuestión de echar culpas, la culpa es de cada uno de nosotros en nuestra neglicencia de primero ver la paja en el ojo ajeno y no tomar nuestras responsabilidades de educarnos y educar a los demás en una cultura del respeto, tolerancia y aceptación.

Más amor, menos odio.

Hasta la próxima.-

La guerra y la paz

Dicen por ahí que no hay mal que dure cien año ni cuerpo que lo aguante.
También dicen que no toda guerra es larga y no toda época de paz es larga. Totalmente de acuerdo.

Pero, ¿Qué queda en el medio?
¿Qué es lo que hay entre la paz y la guerra?
¿Qué es a lo que tenemos que enfrentamos entre las cosas buenas y las cosas malas?

La respuesta es: nosotros mismos.

Seríamos muy hipócritas si cada uno de nosotros abriera su boca para decir que son personas buenas o personas malas.

No existe cosa como tal, o por lo menos no hay totalmente luz y no hay total oscuridad en cada uno de nosotros.

Lo mismo sucede con la guerra y la paz.

Hay una batalla en cada uno de nosotros, sí, lo sé, suena cliché, pero es cierto. Y no, no es con nosotros mismos (o no como tal), o con las cosas que el destino nos pone en el camino de nuestra vida.

La batalla la tenemos con la guerra y la paz.
¿Suena confuso? No tanto, ahí va la aclaración.

Nosotros mismos somos guerra y paz al mismo tiempo, pero de acuerdo a las circunstancias, elegimos en qué momento ser paz y en qué momento ser guerra.

Somos paz cuando elegimos que nuestra tranquilidad vale más que cualquier problema, que cualquier persona, que cualquier objetivo laboral o profesional, que cualquier cosa que se te ocurra.

Somos guerra cuando peleamos y nos hacemos valer frente a cualquier injusticia, ofensa y herida.

Aunque a veces el problema radica en que somos paz ante lo que nos lastima y guerra ante lo que puede representar una solución a los que nos aqueja.

¿Desde cuando podemos estar en paz con lo que te hace daño y quejarnos del apoyo que se nos da?

A veces la paz y la guerra los divide una línea difuminada por nuestros demonios internos.

Si algo nos nos da paz, debemos ser guerra.
Y a veces, en momentos de guerra, la mejor arma es la paz.
Depende de nosotros, encontrar un buen uso a cada una de ellas.

.-Hasta la próxima.

Arte, Ciencia, Luz

Podría decirse que mis alas de halcón "salieron" cuando acompañé a mis padres (cada uno por su lado)a hacer el trámite de su titulación.
Recuerdo haber visto la facultad de Contaduría y el campus Mocambo y pensé "Yo voy a estudiar aquí", más no tenía la vocación de la contabilidad; de lo único que yo estaba segura es que yo iba a estudiar en la Universidad Veracruzana.

Tiempo después, o mejor dicho, muchos años después, mis alas de halcón crecieron cuando, debido a unos trámites, tuve que viajar a Xalapa y me topé con una manifestación que hicieron unos profesores debido a la desaparición de otros profesores; o al menos eso es lo que vagamente recuerdo.

Esto sucedió en una época en la cual Veracruz estaba en del ojo público por sucesos que consternaban y preocupaban a muchos, era tanta la información que se manejaba y había tanta falsa información (Como el famoso "tuitazo" de Maruchi Bravo que movilizó a todo el estado, incluyendo a mi mamá), me sentí frustrada por el hecho de que mucha gente se dejaba llevar por lo que veían y leían "por ahí" y no buscar en una fuente confiable que esto me hizo decidir estudiar periodismo, por ese andar de tener que investigar, buscar información, encontrar la noticia; fue una revelación.

Puesto que yo había decidido estudiar Literatura y letras porque me gustaba mucho escribir historias; pero había aprendido que hay muchas formas de escribir historias y yo quería hacerlo.

Fue entonces que decidí estudiar ciencias de la comunicación; en la escuela en la que estaba estudiando la preparatoria me ofrecían una beca en una universidad que era privada, tuve que consultar a mi profesora de orientación vocacional para poder analizar que decisión debía tomar ya que yo quedé muy motivada a ir a esa escuela   por las instalaciones que nos habían mostrado, el equipo, las materias y lo demás.

Pero lo que me dijo esa maestra fue quizá lo que me ha regido estos últimos años ya que, a pesar de ser egresada de la Villa Rica, me respondió "Haz examen a la UV" y cuando le pregunté el por qué, fue que vino esta reveladora frase "Muchas empresas se dejan llevar por el nombre que tiene tu título, pero al final se dan cuenta que esas escuelas no sirven y llaman al egresado que sabe, la Universidad Veracruzana te dará esa oportunidad".

No dudé más: Saqué mi ficha e hice mi examen.
Porque varios piensan que es muy fácil ir a la UV, cuando para empezar debemos competir por un lugar entre miles de chicos que tienen la misma aspiración que tú: tener un título universitario. 

Si quedas, ya vas "de gane" porque fuiste aceptado en una de la mejores universidades que hay en el sureste del país; pero también te cae el veinte de que si vas a empezar una carrera la tienes que terminar y de ahí debes de trabajar (porque no vas a tener el título de adorno)

Entrando te das cuenta de que el horario quizá no era lo que esperabas, pero ¡Hey! Ya diste el primer paso, y aguantas el hambre, los desvelos, el madrugar, el irte de casa para vivir en una pensión si eres foráneo, preferir un volován de 12 pesos en lugar de una comida corrida (de ingredientes dudosos) de 50 pesos.

Comprendes que hay una buena posibilidad de que no egreses de la carrera en ocho semestres y que no va ser posible estudiar y trabajar simultáneamente.

Nos han dicho de todo: que no estudiamos, que sólo sabemos de cervezas, "pomos" y marihuana, que sólo los "jodidos" estudiamos en la UV y que nunca nos darán oportunidad laboral a comparación de egresados de otras escuelas.

Soy orgullosamente hija de dos egresados de la UV y mi padre fue un contador muy reconocido en la comunidad contable de Veracruz, mi tía ayudó a realizar el plan de estudios que se sigue manejando actualmente en la facultad de Nutrición y tengo conocidos que han sobresalido en sus carreras siendo egresados de la UV y siendo jefes de egresados de otras escuelas.

Pero no sólo la Universidad Veracruzana se encarga de formar profesionistas, sino también magníficos seres humanos; esta es la marca particular de la UV: entre alumnos y comunidad universitaria siempre apoyamos a los compañeros; y esto es algo que puedo comprobar desde mi caso particular: Cuando necesitaba donadores de sangre para mi papá, mis compañeros se ofrecieron a ir a donar.
Otro ejemplo: Un compañero necesitaba ayuda para costear los gastos médicos de su abuelita que estaba internada en el hospital, varios hicieron colecta para ayudarlo.

Quién diga que la comunidad universitaria sólo se junta para las marchas es porque nunca ha estado en una de las facultades para comprobar lo que digo.

¿Y si es así como la Universidad Veracruzana ha logrado forjar profesionistas capaces y seres humanos empáticos con los problemas de la sociedad, quiénes son los que se creen con el derecho de no brindarle apoyo?
Se que en estos últimos años no he podido apoyar a mi universidad como debería pero espero el día de mañana siendo egresada y laborando yo pueda hacerlo ya sea donando equipo que necesita mi facultad o algún recurso que requiera o brindando ayuda económica. Es lo menos que puedo hacer para agradecerle a la Universidad Veracruzana por forjarme estos cuatro  años.  
Soy hija UV
Soy hermana UV
Y pronto seré egresada UV
Así como seré una gran profesionista portando orgullosa los colores y escudo de mi universidad. Mostrando que el arte alimenta el espíritu y el criterio, aprendiendo que la ciencia se debe usar en pos del progreso de la humanidad y entendiendo que la luz que hay en cada ser humano es lo que saca adelante a esta sociedad.