Es un deseo un tanto malsano, porque al final de cuentas, me viene a la mente esa frase que mencionan en "Buscando a Nemo" (un poco tonto pero en serio es una frase de gran sabiduría) "Si insistes en que no le pase nada, nada pasará con él". Esta frase la menciona Dory cuando Marlin menciona que siempre debe protegerlo para que nada le pase a Nemo.
¿A qué voy con esto? Hace meses que ya no me preocupaba por nadie; la persona que más importaba en el mundo cada día me hacía más daño y decidí que era tiempo de soltarlo.
Y para agregar, ya había pasado bastante tiempo que las decisiones de mi familia habían mermado cualquier instinto de protección de parte mía.
Pero gente va y gente viene... Con el andar de estos meses, conocí algunas personas que han reconectado ese aspecto de mí.
Yo no soy la persona más cursi del mundo, ni la más detallista, pero hay gente que se ha enraizado tanto en mi corazón que ya han entrado ao caja de cristal imaginaria: en esa caja donde nada malo les pasaría, nunca sufrirían y todo lo bueno llegaría a su vida.
Sé que mi concepto del amor y del cariño está mal; yo soy de las románticas enfermas que piensan que el amor es sufrir y que el amor es abnegado: No ves por ti, ves por la seguridad y felicidad de esa persona; por la plenitud de los que quieres; todos los esfuerzo y acciones que emprendes es para que los que amas estén bien; tú no importas. Y eso no está bien.
Hoy en día, freno mucho esos instintos, pero la caja de cristal sigue ahí: En donde imaginariamente meto a las personas que quiero para que no sufran; donde me frustro tanto por no ser capaz de evitar que lo malo llegue a sus vidas.
Pero si a ellos no les pasara nada... Nada pasaría con ellos ¿No es así? Las situaciones forjan a las personas. Y tu instinto abnegado del amor te dice que ellos deben pasar por esto para ser felices... y si ellos son felices, tú lo serás.